Xaman Ek, dios de la estrella polar, es una referencia cardinal del norte. El dios de la estrella polar era una de las deidades más conocidas entre los dioses mayas, uno de los guías más importantes, pues la estrella polar, de la cuál estaba a cargo fue una de las referencias más significantes para los mayas, debido a que esta permanece inmóvil en el cielo.
Xaman Ek, el dios que guía
Xaman Ek es la quinta deidad maya más conocida, pues les proporcionó el mayor apoyo a su pueblo; la única estrella inmóvil del cielo, la estrella polar. Debido a esto los viajeros y/o mercaderes mayas podrían dirigirse hacia cualquier zona del territorio y volver, pues la estrella permanecería en el firmamento para guiarles en las noches.
No representa simplemente un fenómeno cósmico, Xaman Ek para la región maya era el dios de la benevolencia y las noches. Esto se debe a su constante orientación hacia los indefensos que se encontraban viajando en las noches, los mercaderes mayas eran quiénes le tenían más afecto y adoración, pues era su único acompañante mientras se encontraban en el camino.
Deidad espiritual
Para el pueblo maya Xaman Ek representaba más que la estrella guía del norte, estos le daban un significado espiritual y/o moral, se debe a que la dirección norte representa un punto cardinal ascendente. Para la cultura maya ya era conocido que el ascenso era una de las formas de alcanzar la plenitud, así que lo relacionaron con lo moral y espiritual.
Los medios para llegar a este fin eran las buenas acciones y el cumplimiento de las normas establecidas por su región. La estrella polar representaba un símbolo de firmeza inquebrantable, para obtener fuerzas en momentos de debilidad y dudas sobre sus decisiones; bastaba con observar el firmamento, así obtendrían fuerzas para continuar.