Sejmet, es la hija de Ra dios del sol, el más importante de la mitología egipcia, esta deidad aparece representada con un cuerpo de mujer, una cabeza de leona y sobre la misma un disco solar, esta diosa siempre lucía un largo vestido rojo el cual personificaba sus raíces.
Por otra parte, ésta por ser tan poderosa y temida tuvo gran importancia para el faraón Amenhotep III quien mandó a construir 365 estatuas para que la veneraran y así poder calmar su ira.
Sejmet
Esta diosa hacía honor a su nombre el cual significa poderosa, pues tenía doble personalidad, una era peligrosa y destructora sedienta de sangre y la otra protectora y sanadora.
Sejmet traía pestes y enfermedades, era dueña de siete flechas que usaba para lanzarla a sus enemigos, esta diosa de la guerra era muy temerosa por la humanidad.
Por otro lado, ella poseía un poder protector y sanador sobre todo curar fracturas en el ser humano por lo que fue llamada la patrona de los médicos.
Atribuciones
Tenía a su cargo varios sacerdotes que practicaban una especie de ritual para lograr neutralizar sus terribles poderes.
Adicionalmente, se le conocía como diosa del amor por estimular pasiones, siendo ésta la más hermosa de los dioses egipcios, y siempre lucía espléndida.
La ira de Sejmet
Además, Sejmet era conocida como el ojo de su padre Ra el dios del sol, quien al ver que los humanos se rebelaron y ya no le iban a rendir tributos, decidió enviar a su hija a perseguirlos y destruirlos.
Por tal motivo, ella enfurecida desata su gran ira y comienza a arremeter en contra de aquellos que le dieron la espalda a su padre.
Su cólera imparable fue tan grande y despiadada que Ra sintió misericordia de la humanidad y por esta razón decidió detenerla, pero no lo logró.
Por esta razón, Ra decide engañarla para detenerla, por lo que mandó a preparar un brebaje de color rojo y arrojarlo en su camino, ella lo bebió pensando que era sangre y se embriagó, es así como pararon la furia de Sejmet.