Lü Dongbin o Lu Tung-Pin también conocido como «lu el progenitor», es uno de «los ocho inmortales» pertenecientes a los dioses Chinos. Se le atribuye ser uno de los primeros maestros de la «alquimia interna» o neidan, además de ser considerado un gran poeta y erudito de su época.
Normalmente se le representa como un hombre inteligente o erudito el cual desea ayudar al hombre a alcanzar la iluminación y la sabiduría mediante el taoísmo. A veces se le representa con una espada en la espalda que simboliza la defensa contra los espíritus malignos.
Las diez pruebas de Lu Tung-Pin
Antes de ser tomado como discípulo por el maestro Zhongli Quan y aprender de este los secretos de la vida hallados en el taoísmo, Lu Tung-Pin fue sometido a diez pruebas para determinar su valía y demostrar ausencia o presencia de algunas características:
Ausentes
- Demostró no tener tristeza o alegría. Esto se vio cuando al encontrar a su esposa a punto de morir, inmediatamente comenzó con los preparativos del funeral pero luego de que esta no falleció simplemente volvió a guardar todo.
- Demostró no tener rabia o ira. Esto se reflejó mientras vendía algunos productos en el mercado, un comprador al que Lu entregó un articulo se negó a pagar y se fue sin recibir queja alguna.
- Demostró no tener resentimiento. Al darle unas monedas a un pedigüeño y recibir un insulto por parte de este, Lu sonrió y siguió su camino.
- Demostró no tener miedo. Un día mientras navegaba en un barco lleno de pasajeros, el clima empeoró tanto al punto de parecer que la nave se hundiría. Lu pasó todo el viaje meditando tranquilamente.
- Mientras se encontraba en su casa haciendo sus deberes, muchos diablos y demonios se alzaron contra Lu diciéndole que iban a tomar su vida pero este ni se inmutó. Luego otros demonios aparecieron reclamando venganza por haber sido asesinados por Lu en otra vida a lo que este contestó que tomaran su vida como corresponde en pago de todas las que él había tomado.
- Demostró no tener lujuria. Una mujer hermosa que se encontraba perdida se encontró con la cabaña en la que Lu se encontraba estudiando y le pidió poder quedarse en ella. Al anochecer la joven tentó a Lu de tener sexo pero este se negó.
- Demostró no tener vanidad. Al volver a su casa y encontrar que se habían robado todas sus pertenencias Lu se puso a trabajar en una granja. Mientras araba los suelos se encontró con un gran tesoro pero lo volvió a enterrar sin tomar ni una moneda.
Presentes
- Demostró ser valiente. Un tigre hambriento se acercó a un rebaño de ovejas que Lu cuidaba, este se paró frente al tigre el cual se sorprendió por la actitud del hombre y se marchó.
- Un vendedor ambulante ofrecía a la multitud una poción mágica que podría matar o entregar la inmortalidad al que la bebiera, Lu la bebió y no le pasó nada.
- Demostró ser correcto. Al llegar del mercado de haber comprado unos utensilios de bronce para sus actividades, se percató de que dichos utensilios estaban hechos de oro e inmediatamente los regresó al vendedor.
