¿Cuáles son los Dioses Japoneses?
Los Principales Dioses de Japón son:
Amaterasu
Por ser la diosa del sol es una de las deidades más importantes, su hermano es Susanoo quien es el dios de la tempestad y con quien a su vez vive algunos hechos que le llevan a encerrarse en una cueva generando grandes inconvenientes para lograr sacarla de allí.
Aizen
Gracias a que cuenta con un tercer ojo se le identifica como el dios tanto del amor como el de los músicos, prostitutas y cantantes.
Izanagi
Es el hombre protagonista junto a su esposa en el mito de la creación, fue uno de los primeros dioses que crearon tierra firme.
Izanami
Es la mujer y esposa de Izanagi, por lo tanto a esta pareja se le adjudica la creación pues gracias a su labor de procreación se poblaron las islas.
Tsukuyomi
Es el dios japonés de la luna y asimismo es uno de los tres hijos nobles de Izanagi.
Shinigami
Se trata de la personificación de la muerte, por lo tanto es un dios que se alimenta de las almas y humanas y asimismo cuenta con la capacidad de elegir quien y como muere alguien. Si bien inicialmente se podría catalogar como un personaje lo malo, lo cierto es que se le confiere un lado ciertamente neutral pues en ocasiones su participación obedece a favores y ayudas.
Amida
Corresponde a una deidad bastante importante pues se encarga de proteger a las almas humanas y por lo tanto se le reconoce como el salvador de la humanidad y como el padre de quienes aspiran a ingresar al paraíso. Se le representa montado en un caballo de siete cabezas mordiendo un anillo o circulo de oro que sostiene entre sus manos.
Kagutsuchi
Dios nipón, hijo de Izanagi e Izanami, en la mitología japonesa corresponde a la deidad del fuego.
Susanoo
Hijo de Izanagi, sus hermanos son Tsukuyomi y Amaterasu, y se trata de la deidad del mar y de las tormentas.
Uke Mochi
Se trata de la diosa japonesa que provee los alimentos esenciales, como el arroz y el trigo.
Inari
También conocido como Oinari, es el Dios de la agricultura y de la fertilidad.
O-Wata-Tsu-Mi
Este dios representado con forma de dragón verde con forma de serpiente, tiene el poder de dominar los mares así como todas las especies que en ellos habitan.
Hachiman
Es el dios de los guerreros samurái y del tiro con arco, es considerado el protector del país del sol naciente.
Takemikazuch
Dios del trueno y de la espada, es considerado como uno de los dioses que participó en el primer círculo de lucha de sumo.
Shinatobe
También conocido como Shinatsuhiko o Nihon Shoki, es el dios de los vientos, el aire, el deseo y la libertad.
Ama no Uzume
Esta diosa japonesa, que obligó a Amaterasu a salir de su cueva, representa la fertilidad, la felicidad y la danza.
Ebisu
Es una de las deidades más buscadas por los japoneses, ya que encarna a la fortuna. Siempre es representado con una caña de pescar y un pescado,
Dentro de la mitología japonesa, los dioses ocupan un lugar sumamente importante pues son por decirlo de alguna manera los protagonistas de los diversos relatos que intentan explicarnos el origen de todo tipo de acontecimientos. Es así como se sabe de una lista que puede alcanzar los 8.000.000 dioses japoneses cada uno con su respectiva participación dentro de esta fascinante cultura.
Dejando claro que los seres poderosos y con habilidades fuera de este mundo juegan un papel determinante para lograr caracterizar a esta sociedad de la manera en que la conocemos debido a que revelan lo más profundo de esta sociedad, a continuación intentaremos citar por lo menos algunos de los dioses más conocidos y con mayor alcance a través de la historia.
Dioses y descendencia divina
Iniciaremos este entretenido recorrido mencionando brevemente algunas de las representaciones más emblemáticas y la relación que les ha sido asignada a estas deidades generalmente del Sintoísmo de acuerdo a su poder.
Los dioses japoneses de la vida y la muerte
Siendo estos momentos tan trascendentales dentro del paso por el mundo para el ser humano, hablaremos un poco sobre estas deidades niponas tan respetadas.
Resulta muy importante asignar el respeto necesario al momento de consultar todos estos dioses de Japón para pretender comprender el sentido de un mito perteneciente a lo más auténtico de Japón, pues ciertamente y como es de dominio popular estos mitos en ocasiones se hacen demasiado pesados para el lector que recién se inicia en este descubrimiento.
La belleza de la estética y todos los detalles tanto físicos como espirituales que traen consigo estas representaciones sagradas sirven entonces para hacernos una gran y verdadera idea de lo mucho que nos falta por explorar a este país quienes somos tan lejanos a esta geografía, pues sale a la luz ese aislamiento tan propio que siempre les ha rodeado y que se convierte en una nueva razón para investigar aún más sobre sus creencias y estructura.
