Dentro de los dioses mayas se encuentra Ehécatl el cual era el dios del viento, ya que con su enorme poder podía controlar la acción del viento a lo largo de la tierra, descubre cuál fue la participación de este dios dentro de la mitología maya.
Ehécatl El dios del viento
Este dios era también denominado en una de sus manifestaciones Quetzalcōātl la serpiente emplumada, por lo que también puede ser llamado como Ehécatl-Quetzalcoatl, además es considerado uno de los principales creadores del mundo.
Uno de los relatos aztecas explica que al crearse el quinto sol, se dice que estaba fijo en el cielo, lo mismo sucede con la luna, sin embargo Ehécatl sopló sobre ellos y los colocó en movimiento, además es el responsable de anunciar el inicio y el fin de la lluvia.
Se enamoró de una hermosa joven mortal llamada Mayáhuel y fue por su amor a ella que le dio a la humanidad la habilidad de amar, esta fuerte atracción que ambos sentían fue representada con un hermoso árbol, este árbol se encuentra en el mismo lugar en el que Ehécatl llegó a la tierra.
Iconografía
Ehécatl era representado físicamente a través de una figura robusta que llevaba una máscara roja puntiaguda con un cráneo enorme y una boca alargada de la cual provenía sus vientos.
Por ser uno de los dioses creadores, las leyendas nos cuenta que este vivía en grandes cuevas con forma circulares para que tuviera menos resistencia al viento, ayudando a la circulación del mismo.
Creencia maya
A lo largo de los siglos los mayas estuvieron sujetos a la creencia de Ehécatl por su gran poder y por las cosas que hizo durante la creación de mundos como lo hizo con la tierra. Para ellos rendirle tributo era una manera de agradecerle por mantener en orden tanto el movimiento del sol y de los vientos que soplaban en la tierra.
